martes, 7 de febrero de 2017
Caer en la tentación
Nunca voy de rebajas, rara vez lo hago. Ayer estuve en el notario, tiene su oficina justo enfrente de unos grandes almacenes y estamos en enero. Al terminar dudé si tomarme un café o ir a ver qué pasaba en la tienda de enfrente. Fueron mis pies, no mi cabeza los que me llevaron allí. ¡Qué horror! cuanta gente.
Me he comprado unas zapatillas para casa, una camiseta de deporte y un jersey de lana. Las zapatillas son las dos del mismo pie, la camiseta me está pequeña y el jersey tiene un descosido.
No sé qué hacer; creo que me saldrá más barato no ir a devolverlos.
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